Belén Aguilera deslumbra en Las Ventas con su mágica voz: emociones a flor de piel en el sold out del Metanoia Tour 2023 

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La noche del viernes la famosa Plaza de Toros de las Ventas se convirtió en un santuario sonoro donde Belén Aguilera, en su «Metanoia Tour 2023«, dejó una marca imborrable. El éxito fue tal que dos fechas adicionales en Madrid y Barcelona fueron necesarias para satisfacer a los fanáticos que se quedaron sin entradas.

El concierto no fue solo un evento musical; fue una experiencia sensorial donde la belleza estética se fusionó con la potencia vocal de una artista en la cúspide de su carrera. La cantante barcelonesa no solo arrasó en Madrid, sino que dejó una estela de admiración y emoción entre todos sus seguidores.

El escenario, adornado con una estética distintiva y representativa del nuevo álbum, se metamorfoseó en un jardín encantado, donde plantas, flores y hojas coexistían. El piano, revestido de hileras en tonos verdes, tejía una magia única en el ambiente. Tres pantallas, una central imponente y dos flanqueándola, sumergían al público en una experiencia visual única. Las luces, focos y un humo inesperado creaban un ambiente misterioso, dejando claro que las Ventas se quedaba pequeño para la grandeza de la cantante. A pesar de ir vestida con un total look en negro, la cantante brillaba como una estrella en la noche.


Antes de la llegada de Belén Aguilera, la escena fue protagonizada por Dani Dicostas y su grupo como telonera. Entonaron brevemente temas como «Yo también me porto mal» o «Si te vas», destacando con su versión de «Ni una sola palabra» de Paulina Rubio. Su actuación generó un ambiente espectacular, impregnado solo de buen rollo. Una elección perfecta para preparar el terreno antes de la entrada triunfal y puntual de Belén Aguilera. 

El escenario se convirtió en un crisol de talento femenino, donde Belén compartió el protagonismo con las artistas y coristas del concierto Sara Rius, Sandra Duarte e Iris Escribano, vestidas de blanco, destacando el papel fundamental de las mujeres en este espectáculo. En las baladas, la música de Helena Martínez y su violonchelo añadían una capa adicional de emotividad. Además, la DJ «Ruptura» hizo vibrar al público, pinchando en momentos clave del show.

Pero el verdadero punto culminante del concierto fue la extraordinaria destreza vocal e interpretativa de la cantante, que consigue dejarnos a todos siempre sin aliento. La artista, conocida por sus «whistle notes», deslumbró con versiones únicas de sus propias canciones, demostrando una versatilidad impresionante.

© Michaels Mads

Línea temporal del concierto

El público aguardaba ansioso el inicio de un recorrido musical que abrió con la inédita «Lolita», dejando entrever la versatilidad y sorpresas que la cantante tenía preparadas.

El viaje continuó con éxitos de su último y penúltimo álbum «Metanoia» y “Superpop”, como «Licántropo»«PAS» o “Vértigo”. Un punto álgido llegó cuando Belénentre lágrimas, conectó profundamente con la audiencia después de interpretar «Camuflo», haciéndonos emocionar a todos los que estábamos presentes en el show. 

Colaboraciones memorables marcaron la noche, desde «La tirita» con la ausencia de Lola Índigo hasta la colaboración en vivo con Samurai en «De charco en charco».

El concierto tuvo momentos íntimos, como la emotiva interpretación de «T’estimo» en su lengua natal, donde el público participó con linternas encendidas, creando una imagen espectacular. Belén también rindió homenaje a Rocío Jurado con «Punto de partida», demostrando así su diversidad artística.

La diversión continuó con «Copiloto» y «Antagonista», antes de un interludio donde Belén reflexionó sobre la controversia del lugar del concierto, diciendo entre risas: «Como de fuerte es que esto sea una plaza de toros».

Belén asumió el rol de DJ pinchando «Republicanas», una de sus canciones estelares de su álbum «Como ves, no siempre he sido mía». La velada culminó con éxtasis durante «Ilusión Óptica», seguido de agradecimientos sinceros de la artista: «Tengo los mejores fans, de verdad. Este es mi sueño, así que gracias de verdad por ayudarme a encontrar quién coño soy».

Mientras sonaba «Quien soy» de fondo, la artista repetía «os quiero mucho» a su público, o como ella lo llama, «sus amigas». La joya «Mía» y otros éxitos como «Camaleón» y «Galgo» cerraron la noche de forma magistral. Después de una hora y cuarto de fantasía el show dio a su fin, pero la energía y emoción de «Metanoia Tour 2023» resonaron en Madrid, dejando a los fans ansiosos por las fechas adicionales en diciembre. Un concierto que fue más que música; fue un viaje emocional y visual, una experiencia que quedará grabada en la memoria de todos los asistentes. ¡Belén Aguilera ha conquistado Madrid y nuestros corazones!



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